Así lo ha afirmado durante su primera intervención ante la Comisión de Economía de la Cámara Baja, donde ha comparecido para dar cuenta de la labor de la CNC a lo largo del último ejercicio como exige la legislación vigente.

García Bernaldo de Quirós ha aprovechado esta intervención para advertir que el nuevo modelo unificado de reguladores que ha propuesto el Ejecutivo abre un "camino que nadie ha recorrido" y que no tiene precedentes a nivel internacional ni modelos de referencia en relación con la mezcla de labores de supervisión y regulación en un mismo organismo, lo que obliga a ser "muy cuidadoso en el diseño" y a alcanzar el "máximo consenso".

"Acertar con el modelo institucional es crítico para que el nivel alcanzado hasta ahora en la defensa de la competencia en España no decaiga", ha dicho, instando a los partidos a "seguir debatiendo el modelo institucional y contar, para su desarrollo, con los agentes interesados, la sociedad civil, las aportaciones que se puedan hacer desde la Academia y también la de los propios organismos llamados a fusionarse".

A renglón seguido, ha defendido que el actual modelo de la CNC, vigente desde hace apenas un lustro, ha tenido un resultado "muy positivo", supone la "elite de las autoridades de defensa de la competencia" y sirve de "referencia e inspiración" para otros países europeos o latinoamericanos, lo que aporta más seguridad jurídica a las empresas españolas cuando implantan sus negocios en estos estados, porque el sistema interpretativo de la competencia es similar al español.

La Ley de Defensa se aprobó por unanimidad

Además, el presidente de la CNC ha recordado a los diputados que la Ley de Defensa de la Competencia fue "aprobada por unanimidad de las fuerzas políticas y con un gran consenso social" que sería "bueno" mantener y que "la nueva arquitectura institucional que se apruebe nazca con ese respaldo unánime y preservando la aplicación eficaz" de la ley.

Finalmente, García Bernaldo de Quirós ha asegurado que la Comisión Nacional de la Competencia es "un organismo eficiencia, independiente y absolutamente solvente desde el punto de vista técnico", cualidades que se deberían mantener. "Sería una pena perder o desaprovechar un modelo institucional como el de la CNC", ha añadido.

"Estoy convencido de que nuestro país no puede permitirse el lujo de bajar el nivel alcanzado estos años en la defensa y la promoción de la competencia. Necesitamos más competencia y necesitamos también, ahora más que nunca, una autoridad de defensa de la competencia fuerte y bien dotada de medios y recursos", ha zanjado.