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Durante 4 varios años, los
empresarios exigieron a los trabajadores a su servicio acudir a su puesto todos
los días excepto dos: Navidad y Año Nuevo, infringiendo con ello toda normativa
en cuanto a jornada, descanso mínimo semanal y vacaciones. Los empleados, que
aceptaron estas condiciones ante el temor de perder su empleo, no percibieron
por esas horas extraordinarias ni compensación económica, ni con descansos.
Paralelamente, los empresarios, ocultando estos hechos a la Seguridad Social,
no ingresaron las cotizaciones correspondientes a las horas realmente
trabajadas. Todo ello generó una deuda valorada en más de 200.000 euros.

El Convenio Colectivo aplicable
permite la realización de jornadas de trabajo en domingos y festivos, siempre
que así lo acepte el trabajador, pero este tiempo debe ser retribuido como horas
extraordinarias, sin perjuicio del descanso semanal que corresponda.

Por todo ello, la AP Pontevedra
 condena a cada empresario a 3 meses de prisión, por un delito contra los
derechos de los trabajadores, y a otros 3 meses, por el delito de defraudación
a la Seguridad Social, más una multa. La AP aplica la atenuante de reparación
del daño dado que, en el momento de dictar sentencia, ya habían abonado la
totalidad de la deuda a los trabajadores reclamantes y parte de la misma a la
Seguridad Social, con la que establecieron un acuerdo de aplazamiento de pago
por el importe pendiente con garantía hipotecaria suficiente. Además, durante 9
meses pierden la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del
derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales.

SAP Pontevedra de 6 mayo de 2019. EDJ 2019/601126

Fuente: ADN Jurídico