PIMEC y el Tribunal Arbitral de Barcelona han firmado un convenio de colaboración para promover los beneficios del arbitraje entre los asociados de la patronal y trabajar así de forma conjunta para ayudar a las pymes a mejorar sus recursos para la salida de la crisis.

Las dos entidades también se han comprometido a desarrollar conjuntamente un sistema de dos niveles para resolver los conflictos empresariales. En concreto, las pymes asociadas a PIMEC podrán resolver sus conflictos con sistemas alternativos a los procedimientos de la justicia ordinaria teniendo en consideración los mencionados dos niveles: en primer lugar, intentar una mediación o conciliación entre las partes y, en el caso de que las partes no aporten una solución, poner en marcha un proceso arbitral.

Según viene observando el Tribunal Arbitral de Barcelona y PIMEC, un significativo número de conflictos no se resuelven para las pymes por la inversión de tiempo y recursos financieros que representa, cosa de la que pueden resultar más adelante ineficiencias o afectaciones a la buena marcha de los negocios y por eso ha trabajado últimamente para ofrecer a las pymes un proceso de resolución de conflictos societarios y mercantiles rápido, eficiente, con oportunidades de llegar voluntariamente a acuerdos y económico a la vez, denominado fasttrack.